Einar escribió:El problema es que si no sabemos nada, podemos estar sobrereaccionando.
La mayoría de los abucheos vienen motivados por la no actuación de PB, que a su vez se alimenta de los rumores de lío con la delegación de Israel.
Y qué pasa si mañana sale que Joost le metió una torta a una empleada de la SVT porque patatas? No lo sabemos, por especular que no quede.
Pero en un caso como ese, seguro que mucha gente ya recogería cable y vería la situación con otros ojos.
Yo esperaría a ver la foto completa antes de tirar a MO a los leones, la verdad.
Lo único que sí le achacaría como punto negativo es el hecho de haber sido muy laxo con ciertos comportamientos (como los de la delegación israelí en redes) o, si me apuras, su participación ya de inicio, aunque esto último a su vez puede que no pudiese hacer nada, ya que las normas no impedían a Israel participar (de hecho, la EBU les paró los pies hasta que plantearon un tema no político, recordemos el October Rain) y había reciente antecedentes de países en conflictos armados activos como el de Azerbaijan (agresor) o Ucrania (defensor/víctima) participando.
De hecho, nos olvidamos de que en 2008-2009 Rusia invadió parte de Georgia, y la EBU no tomó nota, dado que no está en sus normas “notar” aspectos políticos como conflictos (error en mi opinión). De hecho, al año siguiente Georgia fue descalificada al no aceptar ir con otro tema que el que habían escogido: We Don’t Wanna Put In (No queremos a Putin, en un juego de palabras) - en un giro de guion, la víctima se retiraba y el agresor participaba.
La EBU debería de tener una norma de “no participarán países con conflictos armados de calado, salvo excepciones analizadas por el grupo de referencia y justificadas”, tipo permitir si quieren que Ucrania pueda seguir.
Pero como no la tiene, y no se la puede inventar de repente en medio del año ESC, qué se esperaba la gente? Se creen que MO es dios en la EBU y lo que diga va a misa?
Por una parte, si Joost pegó a una persona, a su casa bien merecido. Pero eso no invalida las provocaciones de la delegación israelí, los ataques a algunos medios y demás.
Por otra parte, las normas sí impiden participar a Israel, porque se ha saltado dos de las principales: no meter la imagen del festival en política ni ningún tema de guerras; y no meter política en las letras. La KAN transformó la pre en una oda a la invasión y genocidio en Gaza, con la marca de Eurovisión bien presente. La misma tv presentó una canción con una letra que hacía clara referencia a ese conflicto. Se le denegó esa letra y presentó la misma canción con la letra algo cambiada, sin cambiar para nada el significado. A pesar de haber incumplido de forma tan clara esas dos normas no se les ha expulsado del festival, más cuando no dudaron en expulsar a Bielorrusia y Rusia hace pocos años.
