Bueno, quizás algunos conozcáis esta receta. Es de origen portugués, yo no la conocía hasta que estuve hace un año y medio en Lisboa. Ya sabéis que los portugueses son los reyes del bacalao. Lo probé y estaba buenísimo, la verdad, podría decir que es uno de mis platos favoritos. Asi que se la he tomado prestada a los portugueses y la he incorporado a mi recetario.
Esta semana santa me he quedado solo en casa, y en mi familia era tradición (Y es) no comer en viernes santo carne, y normalmente comemos bacalao, por la vigilia, asi que me lo he cocinado.
Yo lo he preparado asi y me ha quedado bien. Es muy difícil que salga mal, asi que os animo a que lo probéis. Se tarda unos 45 minutos en hacer.
Ingredientes (Para una persona)
- Migas de bacalao (Unos 200 g)
- Media cebolla
- 1 patata
- 2 huevos
- Aceitunas (Deberían ser negras, yo es que solo tenía verdes)
- Aceite de oliva
- Un poco de perejil
- Agua
- Sal
1. El bacalao tiene que estar en remojo desde 2 días antes. Hay que cambiarle el agua cada 8-12 horas, para quitarle toda la sal. Es mejor que uséis migas, puede ser bacalao entero, pero luego tenéis que desmenuzarlo vosotros.
2. Se pela la patata y se corta como si se fueran a hacer patatas fritas. Intentar que las patatas sean muy pequeñas y finas, para que luego el plato quede homogeneo.
3. Se frien las patatas en una olla en abudante aceite. Cuando esten fritas, se ponen a escurrir, se reservan y se quita la mayor parte del aceite de la olla, pero dejando un poco para pochar la cebolla.
4. Se pica la cebolla y se echa en la olla, a fuego medio, para que se vaya dorando poco a poco. Mientras se dora, vamos preparando el bacalao. Cuando la cebolla esté dorada (Unos 5 minutos), añadimos el bacalao y un poquito de agua (1/2 vaso máximo) para que se espese todo un poco. Añadimos también el perejil y lo removemos todo bien. Dejamos freir unos 5 minutos.
5. Añadimos las patatas fritas sobre el bacalao, un poco de sal y de nuevo removemos bien para que se mezcle todo.
6. Mientras se mezclan las patatas con el bacalao, cascamos y batimos los huevos. Cuando estén batidos, los añadimos sobre la mezcla y agitamos, para que el huevo cuaje, eso al gusto (Yo lo he dejado ni crudo ni cuajado).
7. Lo quitamos del fuego y lo servimos en el plato. Ponemos las aceitunas y si queremos, un poquito más de perejil.
Feliz Viernes Santo y felices vacaciones.