Capítulos 16 a 19 leídos.
Me da penilla Sadie. Ella le cuenta todas sus cosas a George, y ve que en cambio él tiene unos secretos de los que no la hace partícipe a ella. Total, que tras la "semi-ruptura" George deja la apacible aldea de Jodie y se dedica a seguir los pasos de Lee Oswald, a caballo entre Mercedes St. en Forth Worth y Dallas.
En esta fase Stephen King se dedica, a través de las escuchas secretas de George, a describir psicológicamente a Oswald, como un personaje bastante huraño y un auténtico maltratador de Marina, a la que tiene sometida. Y luego la madre de Oswald, que le tiene sometido a su vez a él con su carácter controlador. Y los amiguetes de Oswald, en especial el otro George de apellido impronunciable, que está radicalizando cada vez más a Lee, metiéndole nuevas ideas en la cabeza a las que ya de por sí tenía anteriormente.
En la trama amorosa, la escena de la llamada de Sadie a George, en la que le dice que había conocido a otro, con la consiguiente escena de celos de él es muy top. Me encanta la distinción que hace King en este momento entre lo que George piensa y lo que responde en cada momento.
Y finalmente, la crisis de los misiles, y la amenaza nuclear, que es la que une a los tortolitos nuevamente.
Aquí ya se percibe cierta debilidad de George en adelantarle cosas a Sadie sobre el futuro, cuando ésta le da el susto de su vida al pensar que estaba al borde de la muerte por una posible sobredosis, incitada por antecedentes como las fotos que le envía su ex (Ojito con el ex de la escoba, no vuelva a aparecer cual Jimla de la vida...). Ella al parecer se muestra más proclive a respetar los secretos de George, A ver cuánto dura esa reconciliación....