Vuelvo a México, tierra que ha dado grandes y renombrados artistas durante décadas.
Una de las cantantes más famosas y queridas fué Amalia Mendoza, llamada la Tariácuri, palabra indígena para dirigirse al Rey.
Nacida en 1923 en el seno de una familia de músicos, tanto ella como sus hermanos se dedicaron pronto a esto de cantar. Su carrera como solista empezó en 1954, sonando en las principales emisoras de su pais, teniendo inmediato éxito al estar acompañada de grandes compositores mexicanos, que le compusieron principalmente boleros y rancheras, muchas de ellas tan conocidas como "Echame a mí la culpa", "Fallaste corazón" o "Puñalada trapera".
Su especial y única manera de cantar la hacía inconfundible, lloraba en sus interpretaciones, llegando a decir que si lloraba era porque había sufrido mucho en la vida y que sentía sus canciones como experiencias propias. Las canciones de amor y desamor mexicanas suelen tener letras tan desgarradoras, que es fácil comprender que se identificara con ellas.
Su muerte en el año 2001 fué muy sentida en el pais, y se erigieron dos estatuas en su honor: una en su ciudad natal, San Juan Huetamo y otra en Ciudad de México.