Tras el no pase a la final del año anterior con la balada de diva de claudia farinello, malta volvía a apostar por su tradicional malta eurovision song contest ( un aplauso por el que inventó el nombre ) que seguía con la clásica mecánica de una sola semifinal y una final. En ella nos encontrábamos con Christabelle, una joven maltesa que ya habia intentado 3 veces representar a malta incluyendo en 2015 y 2016. Pero como a la cuarta va la vencida Christabelle ganó la preselección con un tema movido y bailable con toques místicos llamado Taboo cuyo autor entre otros era el popular G:Son. El tema hablaba sobre la igualdad, la inclusión, las diferentes facetas de la sociedad y sobre las enfermedades mentales.
La puesta en escena que utilizó en su pre estaba bastante currada con un cubo de cristal con proyecciones, luces y unos cuantos bailarines, dando una atmósfera idónea a la canción. El videoclip también acompañó al tema siendo uno de los mejores de la edición ya que era completamente coherente y transmitía el mensaje necesario.
La propuesta fue recibida de una manera un tanto tibia por los eurofans, muchos decian que era muy genérica, simplona y vista mientras que otras propuestas como la sueca eran aplaudidas. En los tops de youtube casi siempre se posicionaba en los puestos 20-30, haciendo que su pase a la final no estuviera del todo claro. Su temporada de promoción fue moderada pero no nula, acudiendo a las pre parties de Amsterdam y Moscú, dejando claro que podía defender el tema a la perfección.
Después de eso se dio a conocer que Malta actuaría en la segunda semifinal, la más fácil, por lo que las esperanzas del pase de Malta eran cada vez mayores y casi todo el mundo consideraba que Taboo era lo suficientemente buena como para pasar. La noche llegó y a Malta le tocaba actuar en el puesto 12, entre el pop genérico de Polonia y el rock cañero de Hungría. Christabelle empezaba la actuación dentro de un cubo que visto desde arriba tenía forma dodecagonal en forma de equis, en sus laterales se mostraban imágenes LED un poco difíciles de interpretar con números y tonos negros y rojos. A su vez una gran llamarada de fuego salía por todo el Altice Arena acompasado con los primeros versos de la canción, dándole más espectacularidad aún. Poco después unos lasers verdes inundaban el escenario y todo el estadio se vino arriba . Ya hacia el final de la canción salía una bailarina haciendo un baile muy brusco que a mi parecer quedó muy bien y logró transmitir muy bien el mensaje. En conclusión fue una canción muy aplaudida y que dejó muy buenas sensaciones tras la actuación.
Llegó la hora de anunciar los sobres y estos iban pasando y pasando y tristemente malta no estaba en ninguno
. En cambio habian pasado otras canciones como la australiana que no paró de desafinar en la actuación o la canción barata de moldavia. Finalmente se supo que malta quedo en un puesto 13 con 101 puntazos, solo a 10 puntos Hungría, los décimos. Además, se supo que quedó super bien en el jurado pero el televoto la hundió sorprendentemente. En fin, una pena, porque siempre ha sido una canción muy decente que se creció aún más con su puesta en escena.