FICHA TÉCNICA2014. Ese es el año en el que gran parte de los eurofans empezaron a adorar a Jessica Mauboy. Jessica fue la primera abanderada del país de los canguros en aparecer en Eurovisión. Eso sí, sin competir, una especie de representante venida a menos. Aunque todos sabemos que no fue la primera australiana en el festival: Peter Doyle y Marty Kristian (de The New Seekers), Olivia Newton-John, John Farrar (de The Shadows), Johnny Logan, Gina G y Jane Comerford (vocalista de Texas Lightning) fueron representantes de Reino Unido, Irlanda y Alemania con pasaporte australiano mucho antes de que Jessica llegara a Copenhague.
Como decía, Jessica participó en 2014, como parte del
interval act de la segunda semifinal. Y
nos deleitó con Sea of Flags, un tema que se prestaba a
berrear cantar y
orangutanear bailar como solo ella sabe:
Tras dicha aparición estelar, y después de que la EBU invitara formalmente a Australia a participar en Eurovisión con la excusa del 60º aniversario del festival y haciendo gala del uso del eslogan de ese año,
Building Bridges, fueron muchos los eurofans que pidieron una participación mauboyana con todas las de la ley. Pero parecía que no estaba, ni estaría jamás, entre los planes de la SBS: Guy Sebastian, Dami Im e Isaiah Firebrace fueron los tres primeros representantes australianos.
¿Y a quién mandaría la SBS a Lisboa? The Veronicas, Delta Goodrem... Pues no. Nada de eso. Llegó el turno de nuestra diva indígena. Ya lo dice el dicho: "A falta de
Valentinas Monettas pan, buenas son
Jessicas Mauboys tortas".
Jessica nos trajo
We Got Love, un tema que, de nuevo, invitaba a cantar y bailar. Eso en estudio. En directo se magnificó todo. Ni ella ni nosotros nos conformamos con una actuación correcta. Todo lo contrario.
We Got Love se convirtió en un buen motivo para gritar, berrear, perrear, despatarrarse, orangutanear, dar melenazos. Es decir, para disfrutar al máximo. Y eso fue lo que tanto ella como nosotros hicimos en directo. A las pruebas me remito:
Sin embargo, pese a volver locos a todos los presentes en el Altice Arena en varias ocasiones, y a hacer bailar a cientos de miles de eurofans en sus habitaciones
mientras que se grababan como Nirgal al ritmo de Aphrodisiac, Jessica se fue a casa con el peor resultado de Australia en el concurso: un 20º puesto, lejos de las segunda, quinta y novena posiciones anteriores. ¿Qué pasó? ¿Mucho
hater de Australia? ¿No afinó lo suficiente? ¿Un nivel de competición demasiado alto? Qué más da... ¿A quién le importa el resultado con lo que disfrutamos con ella? Si hasta consiguió conquistarme a mí, que casi me dio un parraque como el de Carmen Lomana en Masterchef cuando la anunciaron como representante...
Jessica, ForoESC
U. Ahora que se note en las puntuaciones.