Ficha técnica completa de la canción
Azerbaiyán nos ha dado por diez años joyas eurovisivas. A pesar de que en los últimos años hemos sido testigos de un declive en los resultados, el país del fuego ha seguido siendo de lo mejor del festival. En un aparente retorno a la calidad, en 2017 nos deleitaron con Dihaj, la diva darks y su Skeletons en un pop alternativo.
Dihaj viendo la temporada eurovisiva 2018
Para 2018, la Ictimai comenzó con la actividad temprano en el año, y el 8 de noviembre presentaron a su representante para la eurofiesta. Nuevamente llevarían una diva: Aisel Mammadova, o Aisel para los fans. Esta mujer nacida en Bakú en 1989 comenzó su carrera en el conservatorio de música de Bakú y se especializa en jazz . Principalmente toca el piano.
Aisel, diva hermosa afrodita fantástica etérea mágica de la tierra del fuego en pose “Tómame una instantánea como si no me diera cuenta”
El 29 de enero se determinó que Azerbaiyán quedaría ubicada en la primera semifinal, como siempre junto con la rival Armenia.
Filomena Cautela en el sorteo de semis sosteniendo el papel de Azerbaiyán.
Respecto a la canción, luego de lanzarse por Europa en la búsqueda de ella, Aisel eligió tres canciones que le convencieran. En un proceso semiabierto, se eligió a X my heart (tradúzcase como “te lo prometo” y no como “cruzo mi corazón”. La canción es una especie de midtempo que trata sobre una separación que se espera no sea eterna… vamos, un “peace peace, love love” en potencia. La pieza fue compuesta y elaborada por el Dream team, pues lleva al Kontopoulos como músico, como compositora a Sandra Bjurman (sueca ) y a Fokas Evangelinos como director de escenorafía. El ritmo no es malo, la canción no es mala, Aisel definitivamente no es mala, pero la canción presentada el 4 y el 13 de marzo sabían descafeinados, o al menos algo que se quedaba corto comparado con Skeletons. Azerbaiyán regresó al ikea y al Dream team para dejar
Video oficial
La canción fue recibida bien, pero sin euforia. El foro no la hateó, pero no se llenó del Temazo supremo como era costumbre. El video, igual que la canción, resultó sin mucha emoción y es Aisel cantando en un jardín con bailarines vestidos de blanco.
Para estos momentos, ya todos los países tenían elegida la canción. A pesar de que el nivel general de la edición no estaba para derrochar, la primera semifinal se perfiló como una de las más grandes carnicerías en la historia reciente del festival. El pase azerí se complicaba como no lo hacía desde 2015.
Aisel no asistió a la Preparty en Riga (pero básicamente ese evento no existió), ni a Londres, fue de las pocas que no asistió al Eurovision in concert en Ámsterdam, ni a Madrid. Pues, solo asistió a los cercanos que fueron Moscú y el Israel Calling.
Actuación en el Israel Calling
Encarna a dedo decidió que abrieran el festival. Es una carga un tanto pesada, pues mientras que Armenia abrió el festival en 2014 y Suecia en 2017 con buenos resultados, Moldavia lo abrió en 2015 y Finlandia en 2016 sin buena suerte. Aisel cantaría antes de la balada islandesa.
Llegaron los ensayos y Azerbaiyán llegaba 27° en las apuestas. Su posición en las casas de apuestas no la modificaría tras ver que el ensayo era ella en un vestido vaporoso y blanco, corriendo descalza por el escenario majestuoso de Lisboa y con bailarines haciendo una especia de bola de energía (o Genkidama).
Presentación en la primera semifinal.
El 8 de mayo Aisel salió a darlo todo, un poco nerviosa pero con un directo más que decente. El público la recibió bien pero sin la ovación, justo como los últimos años para Azerbaiyán.
Llegó el momento de los sobres y el primero fue Austria… todo tranquilo, quedan 9 espacios…
Momento del séptimo sobre, es Bulgaria y todavía no mencionan a Azerbaiyán. Quedan tres sobres y en la fila sigue Grecia, Bélgica, Finlandia y Armenia que fácilmente podrían ganar el pase sobre Aisel. Llega el momento del último sobre… y es Irlanda.
Ya en la final la pudimos ver… No, esperen.
Azerbaiyán por primera vez se quedó en semifinales.
Torres más altas han caído, pero pocas tan majestuosas como Azerbaiyán.
Pues bien, la historia de Azerbaiyán en Eurovisión 2018 llegó a su fin. No sabemos si reemplazará a Safura en el calabozo o si tendrá que exiliarse en Turquía como ha sido la costumbre. Lo que sí creo es que es un llamado para la Ictimai para que evolucione al ritmo que lo ha hecho el festival en los últimos años. El televoto ha madurado mucho y las tarjetas SIM no son suficientes. Llevar al Dream team y una cantante buena no siempre bastan, aún si fueras Suecia. Espero de verdad que en 2019 regresen con todo con otra canción maravillosa.
Dejo a continuación las redes de Aisel. Gracias por leer mi primer WAY de este año (y tercero de Azerbaiyán )