Túnez

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Túnez fue mi primer contacto con el África norteña (exceptuando una breve visita de unas pocas horas a Ceuta en 1989), en el año 2005. Quien me iba a decir a mí por aquel entonces que acabaría teniendo un contacto tan estrecho con el norte del continente jejeje. El viaje fue un poco de imprevisto ya que lo contratamos una semana antes de salir porque vimos una oferta barata. Eso sí, el viaje sólo incluía vuelos y estancia con media pensión en un hotel de la zona turística de playas, por lo que las excursiones las tuvimos que hacer por nuestra cuenta o contratarlas aparte en el propio hotel.

Entonces yo estaba muy verde en el tema de organizar viajes, si fuera ahora seguro que la cosa cambiaba, y mucho. Aún así, fue un viaje muy interesante, ya que el choque con lo que conocía de antes, tanto en cultura como en paisajes, fue bastante grande. Y además pude cumplir uno de mis sueños que era pisar las arenas del Sáhara.

Hammamet: se trata de una de las ciudades más turísticas del país, entendiendo como turística que posee un complejo de hoteles modernos de tipo occidental de los de todo (o casi todo) incluido. Fue el sitio donde tenía el hotel y estuvo bastante bien. La ciudad tiene un centro histórico (medina) impoluto, muy reconstruído y en perfectas condiciones, pero que acaba pareciendo un decorado para turistas y lleno de tiendas de souvernirs. Está rodeado por una muralla y una casba (fortaleza) junto al mar y la playa, que incluye una cafetería-tetería donde descubrí el té tunecino que me encantó (te moruno con piñones). La ciudad tiene un particular olor a jazmín, ya que está por todas partes.

Lo de que pareciera un decorado para turistas no lo vi entonces, fue cuando visité la media de Tetuán (Marruecos), que es mucho más auténtica y real, aunque no tan bien cuidada.









Túnez: La excursión a la capital del país la hicimos por nuestra cuenta, alquilando un coche con una pareja de una chica iraní y un chico marroquí. Me pareció una ciudad limpia, agradable para pasear, con un zoco no muy grande pero cuidado. Lo malo es que cuando fuimos las tiendas estaban cerradas y no vimos el típico ambiente de los zocos. La mezquita tampoco pudimos visitarla por dentro.











Cartago: Muy cerca de la capital se encuentra la que fuera la ciudad principal del imperio cartaginés, que le plantó cara a Roma, y también universalmente famosa por ser la ciudad de nacimiento de Amina Annabi (Francia 1991) La ciudad es bastante anodina y fea, muy industrial, pero tiene las ruinas de la antigua Cartago que es lo realmente interesante, aunque hay que echarle mucha imaginación debido al mal estado de conservación:





Sidi Bou Said: A escasos kilómetros de Cartago se encuentra este pueblo pintoresco, que es uno de los más bonitos y visitados de Túnez, con cierto ambiente hippy. Está situado en una colina, con vistas al mar, y todo está pintado de blanco con las puertas y ventanas en azul. Es el típico pueblo árabe con calles estrechas. Tiene una cafetería muy famosa en el centro del pueblo donde se citaban los intelectuales tunecinos.

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En el hotel contratamos una excursión de dos días por el desierto, que incluía una noche en Douz. Fue un acierto porque es lo que más me gustó del viaje, aunque también hay que decir que fue agotador. En ese fin de semana pudimos visitar varios puntos de interés.

El Djem: En medio de un pueblo de camino al desierto se alza uno de los anfiteatros romanos mejor conservados, quizá el mejor conservado. Se alza imponente en medio de las casas del pueblo. Es una visita muy interesante ya que permite hacerse una idea muy clara de cómo eran y cómo funcionaban. Aquí se rodó parte de la película "Gladiator".





Matmata: Túnez está muy relacionado con La Guerra de las Galaxias. George Lucas se inspiró en el paisaje tunecino y algunas de sus ciudades para recrear algunos de los mundos de la película. Muchas escenas se rodaron en el país, aún se conservan decorados. Matmata es una de estas localizaciones, y donde el equipo se hospedó durante el rodaje. El pueblo destaca por sus "casas trogloditas", excavadas bajo tierra y con las habitaciones dispuestas alrededor de un patio abierto al cielo. Se puede visitar alguna de las casas por dentro, ya que las familias se ganan así un dinero extra y te invitan a un té y unas pastas hechos por ellos mismos.







Douz: Esta ciudad es de fundación bastante reciente y se encuentra situada justo en el límite con el Sáhara, donde empiezan las grandes dunas de arena (erg). Debido a esto cuenta con una pequeña zona de hoteles que es donde pasamos una noche. En Douz nos llevaron donde empiezan las dunas y allí pudimos montar en camello, dar un paseo por la arena y luego te dejaban un rato a tus anchas en medio de las dunas, sin nada más a la vista que montañas de arena por todas partes. Una gozada. Fue lo que más me impresionó de todo el viaje.







Esa noche dimos una vuelta por la zona cercana al hotel, a las afueras de la ciudad, y llegamos a una zona tapiada donde se escuchaba música dentro. En el grupo venía el chico marroquí que comenté antes y les pidió a los de la puerta que si nos dejaban entrar y accedieron, y resultó ser una zona con jaimas (tiendas) donde estaban celebrando algún tipo de ceremonia con música en directo, bailes, comida, etc. Fue una experiencia impresionante también.





Chott El Jerid: es un antiguo mar interior que se ha ido desecando y la sal ha quedado acumulada en el suelo. El paisaje es como de película de ciencia ficción, y más si lo ves al amanecer como nos pasó a nosotros. Una carretera larga y recta atraviesa el mar y parece que estás en medio de la nada, y en medio hay una zona de descanso con unos baños peculiares y tenderetes donde venden rosas del desierto. La gente ha hecho esculturas con la sal depositada en el suelo.









Tozeur por su arquitectura de ladrillo es una ciudad diferente al resto de las que vimos en el viaje. Su palmeral es enorme y patrimonio de la Humanidad. Aquí paramos poco rato, sólo para coger los 4x4 que nos llevarían a hacer una ruta por los oasis de montaña y las pistas de las minas cerca de Gafsa, pero lo poco que vi me gustó. No pude evitar ir tarareando I treni de Tozeur (Italia 1984)







Oasis de Chebika: este oasis de montaña es espectacular, en medio del desierto pedregoso y rocoso te encuentras con esta zona con cascadas, lagos, vegetación... y excavado en la montaña. Es para perderse un rato largo por aquí. No me importaría volver por mi cuenta junto a Tozeur.









Minas de fosfato: Con los 4x4 fuimos recorriendo las pistas que discurren entre las minas de fosfato entre Chebika y Gafsa. Fue muy divertido porque el piloto iba derrapando y haciendo el gili por allí. Quizá un poco temerario, no lo sé, pero lo pasamos genial.



[img]Kairuán:[/img] es la cuarta ciudad santa del Islam y su mezquita una de las más importantes y centro de peregrinación. La entrada está prohibida para los no creyentes pero se pueden ver los patios desde fuera:

[Edu.R]

Yo también estuve una semana en Túnez con motivo de mi viaje de fin de carrera (2009). Hicimos un tour de 4 dias y luego estuvimos 3 días en Hammamet en un hotel. El tour lo empezamos yendo desde Tunez hasta El Djem, bajando hasta el desierto y luego volviendo a subir. El último día nos ofrecieron una excursión Túnez-Sidi Bou Said-Cartago-Tunez (Aeropuerto), recuerdo que muchos compañeros prefirieron quedarse un día más en el hotel, para mi el último día fue lo mejor del viaje . Esta tarde subo las fotos más representativas para complementar las de Omaringa.

Comento lo más reseñable:

El Djem: El anfiteatro es espectacular, y sinceramente, no tiene mucho que envidiarle al de Roma en cuanto a estructura y conservación. Es más pequeño, pero no hay una gran diferencia como para desmerecer este.

Tunis: Nosotros fuimos 'acompañados' y solo vimos la zona del Zoco y alrededores, la verdad que me dio mejor sensación de la que me vendieron en un principio, que ni de coña fuera solo, etc.

Sidi Bou Said: Para mi fue lo mejor del viaje, yo creo que uno no puede ir a Túnez y no ver Sidi Bou Said. Bonito y muy mediterráneo.

Cartago (Ruinas): Bien por el nombre, porque son eso, ruinas, es complicado imaginarse como era realmente. Decir que muy cerca de las ruinas está el Palacio presidencial, pero que no se le pueden hacer fotos, ni siquiera a mucha distancia, por ''seguridad''.

Kairuán: La mezquita muy bonita por fuera, me pareció emosórico que no te dejasen pasar si no eras musulmán, pero bueno...

Desierto: No recuerdo si fue en Douz, como Omaringa, pero pudimos montar en dromedario , y luego estaba previsto dormir en jaimas, pero la noche anterior hubo una tormenta de arena y no estaban disponibles, asique nos llevaron a un hotel que estaba en el desierto. El hotel era muy cutre, recuerdo que me fui a duchar y el agua salía marrón . Pasear de noche por el desierto fue brutal, además esa noche había luna llena.

Mar de sal: También precioso y muy curioso, cuando nosotros fuimos no quedaba mucho agua, pero el suficiente para poder apreciarlo. Los váteres eso que ha puesto Omaringa los vi yo también, lo que no ha puesto es 'la parte de atrás'

Oasis de Chebika: Lo que más recuerdo, además del Oasis, muy llamativo, es que cuando estabamos yendo hacia él y pasando por el pueblo, vinieron muchisimos niños a pedirnos 'algo', porque fue un tour cerrado y nunca llegamos a interactuar con la población salvo en este punto. Y eso que Túnez es de los paises 'ricos' de África, pero ves a la gente y la verdad que, por lo menos, te llama la atención.

También nos enseñaron una mañana como cogen los dátiles en los palmerales (Creo que fue cerca de Tozeur) y un espectáculo tunecino con bailes diversos.

En general bien, aunque es un país en el que no me sentí cómodo, los vendedores son MUY pesados, sensación de que me estaban timando todo el rato, la comida... regular y encima el guía intentándonos vender las bondades del Islam, con cosas como: 'A ver, los hombres y las mujeres no oran juntos en las mezquitas, porque imagínate que eres hombre, te pones a orar y en frente tienes una mujer, puedes tener tentaciones y claro, eso es malo'