Re: Escocia
Publicado: Dom, 25 Sep 2016, 19:01:10
Día 13 de Agosto:
Tocaba ya dejar las Highlands y adentranos en la zona central del país. La diferencia paisajística es notable, pero también es cierto que las carreteras, en general, fueron mucho mejores a partir de este día. Nuestra primera parada del día fue en Newtonmore, una localidad cercana al Parque Nacional de los Cairngorns. En Newtonmore se encuentra el fantástico "Highland Folk Museum", un parque al aire libre donde se recrean distintas estancias y casas de diversas épocas de la historia de Escocia. Incluye un área con casas de piedra al estilo tradicional donde se han rodado episodios de la serie Outlander, y donde se pueden probar tes artesanales, hacer manualidades, ver cómo se trabaja la madera para construir instrumentos musicales... La otra parte es más moderna y se encuentran recreaciones de casas tradicionales, una estación de tren, una granja, y una escuela de los años 30 del siglo XX donde puedes pasar un buen rato a las órdenes de la maestra del pueblo. Nos gustó muchísimo este sitio y le dedicamos quizá tres horas, y si se viaja con niños creo que es imprescindible ya que lo disfrutan mucho (y los mayores también, para qué engañarnos ) y encima es gratis.
Después fuimos a ver el Blair Castle, que dicen que es uno de los más bonitos de Escocia, pero nuestra intención era verlo sólo por fuera, ya que en los días siguientes veríamos alguno más y éste no estaba inluido en la Explorer Pass. Sin embargo, al llegar vimos que no era posible verlo desde fuera ya que se encuentra rodeado por un jardín y en cierto momento hay un guarda y de ahí no puedes pasar a menos que pagues, así que nos dimos la vuelta y nos fuimos al pueblo de Pitlochry. Se trata de un pueblo bonito, con casas de piedra y ambientillo en la calle principal. Allí estuvimos paseando tranquilamente por el centro del pueblo, tomando un café, etc y vimos las escaleras de salmones, una construcción que sirve para que los peces, sobre todo salmones, puedan remontar la presa que hay en el pueblo en sus ciclos de cría. Lamentablemente en el rato que estuvimos nosotros no pasó ninguno, ya que hay un marcador que los va contando y no cambió mientras duró nuestra visita.
Nuestra idea era llegar a la siguiente casa que teníamos reservada para esa noche y cenar allí algo que compráramos en el súper, pero se nos había hecho tarde y quedaba un buen trecho, así que decidimos parar en la ciudad de Perth... y menos mal que lo hicimos!! El centro de esta ciudad no es gran cosa, aunque feo tampoco. Quizá por ser un día entre semana tampoco vimos mucha animación. Cenamos en un pub típico escocés donde sí dejaban entrar a los niños, ya que en la mayoría no les dejan. La verdad es que el fish and chips me gustó bastante jejeje.
Después de cenar nos fuimos a la casa. Por los kilómetros que marcaba el GPS parecía que tardaríamos poco en llegar, pero estaba en un pueblo de 4 casas perdido en medio de unas montañas y las carreteras volvieron a ser complicadas, de un sólo carril para ambos sentidos y encima de noche y no se veía apenas nada. La casa resultó ser bastante mala, vieja y poco limpia y el dueño..., bueno, digamos que peculiar, a mi me dio un poco de miedo con las pintas de yonki que tenía. La cocina no nos inspiró nada de confianza, ni la tetera estaba limpia, así que menos mal que cenamos fuera esa noche. Si a todo esto añadimos que no había cobertura de móvil, no funcionaba el wifi de la casa, había una reunión en el salón del dueño con otras personas... pues estábamos un poco condicionados y llamé a la casa "la casa del miedo". Por suerte a la mañana siguiente la dejábamos y no estuvimos allí ni 12 horas, era un lugar de paso para dormir y listo, ni siquiera nos duchamos. Al día siguiente, mientras desayunábamos en una cafetería, nos llevaríamos una sorpresa...
Tocaba ya dejar las Highlands y adentranos en la zona central del país. La diferencia paisajística es notable, pero también es cierto que las carreteras, en general, fueron mucho mejores a partir de este día. Nuestra primera parada del día fue en Newtonmore, una localidad cercana al Parque Nacional de los Cairngorns. En Newtonmore se encuentra el fantástico "Highland Folk Museum", un parque al aire libre donde se recrean distintas estancias y casas de diversas épocas de la historia de Escocia. Incluye un área con casas de piedra al estilo tradicional donde se han rodado episodios de la serie Outlander, y donde se pueden probar tes artesanales, hacer manualidades, ver cómo se trabaja la madera para construir instrumentos musicales... La otra parte es más moderna y se encuentran recreaciones de casas tradicionales, una estación de tren, una granja, y una escuela de los años 30 del siglo XX donde puedes pasar un buen rato a las órdenes de la maestra del pueblo. Nos gustó muchísimo este sitio y le dedicamos quizá tres horas, y si se viaja con niños creo que es imprescindible ya que lo disfrutan mucho (y los mayores también, para qué engañarnos ) y encima es gratis.
Después fuimos a ver el Blair Castle, que dicen que es uno de los más bonitos de Escocia, pero nuestra intención era verlo sólo por fuera, ya que en los días siguientes veríamos alguno más y éste no estaba inluido en la Explorer Pass. Sin embargo, al llegar vimos que no era posible verlo desde fuera ya que se encuentra rodeado por un jardín y en cierto momento hay un guarda y de ahí no puedes pasar a menos que pagues, así que nos dimos la vuelta y nos fuimos al pueblo de Pitlochry. Se trata de un pueblo bonito, con casas de piedra y ambientillo en la calle principal. Allí estuvimos paseando tranquilamente por el centro del pueblo, tomando un café, etc y vimos las escaleras de salmones, una construcción que sirve para que los peces, sobre todo salmones, puedan remontar la presa que hay en el pueblo en sus ciclos de cría. Lamentablemente en el rato que estuvimos nosotros no pasó ninguno, ya que hay un marcador que los va contando y no cambió mientras duró nuestra visita.
Nuestra idea era llegar a la siguiente casa que teníamos reservada para esa noche y cenar allí algo que compráramos en el súper, pero se nos había hecho tarde y quedaba un buen trecho, así que decidimos parar en la ciudad de Perth... y menos mal que lo hicimos!! El centro de esta ciudad no es gran cosa, aunque feo tampoco. Quizá por ser un día entre semana tampoco vimos mucha animación. Cenamos en un pub típico escocés donde sí dejaban entrar a los niños, ya que en la mayoría no les dejan. La verdad es que el fish and chips me gustó bastante jejeje.
Después de cenar nos fuimos a la casa. Por los kilómetros que marcaba el GPS parecía que tardaríamos poco en llegar, pero estaba en un pueblo de 4 casas perdido en medio de unas montañas y las carreteras volvieron a ser complicadas, de un sólo carril para ambos sentidos y encima de noche y no se veía apenas nada. La casa resultó ser bastante mala, vieja y poco limpia y el dueño..., bueno, digamos que peculiar, a mi me dio un poco de miedo con las pintas de yonki que tenía. La cocina no nos inspiró nada de confianza, ni la tetera estaba limpia, así que menos mal que cenamos fuera esa noche. Si a todo esto añadimos que no había cobertura de móvil, no funcionaba el wifi de la casa, había una reunión en el salón del dueño con otras personas... pues estábamos un poco condicionados y llamé a la casa "la casa del miedo". Por suerte a la mañana siguiente la dejábamos y no estuvimos allí ni 12 horas, era un lugar de paso para dormir y listo, ni siquiera nos duchamos. Al día siguiente, mientras desayunábamos en una cafetería, nos llevaríamos una sorpresa...