Los Prisioneros fue una banda chilena, considerada la más importante de su país y una de las más destacadas e influyentes de América Latina. En sus inicios, desarrolló un sonido new wave con matices punk para posteriormente acercarse al synth pop. Se hizo conocida por sus canciones llenas de contenido y de crítica social, lo que sirvió de inspiración para despertar a una generación que estaba siendo oprimida por la dictadura militar, quienes emplearon estos temas como lucha contra el régimen de Augusto Pinochet. Esto provocó una censura a la banda en los principales medios de comunicación, hasta principios de los años 1990. A pesar del veto, tuvieron un gran éxito comercial sin precedentes, que traspasó fronteras en países como Colombia, Ecuador y Perú.
«Nunca quedas mal con nadie» es una denuncia de los artistas que se sienten progresistas o críticos del establishment sólo adoptando una pose estética, como podrían ser los hippies, en especial los representantes del llamado "Canto Nuevo" chileno.
Esta canción en un antecedente al planteamiento del libro «Rebelarse vende, el negocio de la contracultura» y que si bien en su origen fue, al parecer, realizada para atacar a los artistas que se planteaban como opositores a la dictadura de Pinochet, la letra alcanzó una sorprendente universalidad.
Canción en Estudio
https://www.youtube.com/watch?v=EGQ8EYGcltk
Actuación en vivo.
https://www.youtube.com/watch?v=tfcTr1xykKk
